23 de abril de 2007

Día 2 Gyeongju: Templo Bulguksa, Parque Nacional de Gyeongju, Museo y muchos niños.


El jueves nos despertamos temprano para aprovechar el día y para visitar el templo que Bulguksa que se encuentra aproximadamente a 35 minutos de la ciudad.

Antes de tomar el camión #10 que nos llevaria al templo, fuimos a comprar agua, vitaminas y kimbab (rollos con verduras) para desayunar. El camión nos costo solo $1 dólar y llegamos al templo a las 10:30am. Nos dimos cuenta al llegar que habia muchos camiones con niños que iban de excursión. Desde ese momento sabía que iba a ser una visita interesante, ya que los niños coreanos se emocionan mucho al ver a extranjeros, y al parecer Melissa y yo eramos los únicos ahí.


El templo Bulguksa, el templo del Buda, se encuentra en la montaña Tohamsan. Su construcción fue terminada bajo supervisión del primer ministro Kim Dae-seong en el décimo año del reino de Silla, Rey Gyeongdeok (751).
Por su perfecta culminación de la creencia budista, de la estética, y de la ingeniería avanzada, el Templo Bulguksa fue colocado en lista del Patrimonio Cultural de la Humanidad de UNESCO en diciembre de 1995.

Tras recorrer el templo por varias horas, contestar miles de preguntas de niños como what is your name? where are you from? y tras tomar bastantes fotos decidimos regresar a Gyeongju para ir al parque nacional y al museo.




El parque nacional lucía impresionante cubierto de flores amarillas. Tengo que admitir que es de los lugares que más me han gustado de Corea. Vimos como llegaba mucha gente a tomarse foto entre las flores, desde parejas, familias, estudiantes, incluso nos toco ver a unas monjitas. El contraste de las flores, los arboles y las montañas como fondo hacian que pareciera que estaba viviendo dentro de una pintura. Tras la sesion fotográfica nos dirijimos al museo de Gyeongju.


En el museo nos volvimos a encontrar a una gran cantidad de niños excursionistas pero en esta ocasión fue el caos total, ya que desde que nos vieron nos empezaban a gritar, a saludar y todos querian platicar con nosotros. Los primero cinco minutos fue divertido pero despues llegaban y nos pedían que les firmaramos sus libretas con nuestro nombre. Y después nos perseguian por todos lados. Llego un momento que se nos juntaron a Melissa y a mi unos 15 o 20 niños pidiendonos nuestras firmas en sus libretas.




Total que creo que no la pasamos más tiempo firmando "autografos" y contestando preguntas que en verdad disfrutando del museo, pero admito que no se me va a olvidar la experiencia.

1 comentario:

Shints dijo...

awww mi vida!..

Para empezar te ves precioso, mas delgado y bien sexy con la barbita... aaa me gusta ese lugar las flores amarillas son mis faves (L)..

Firmame una boobie Rodri u mai jirou :D jajajajajajaajajajajaja!!